El Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso) en España ofrece una serie de beneficios para personas que padecen invalidez. Estos incluyen un pago económico en forma de pensión no contributiva de invalidez, atención médica y farmacéutica sin costo y acceso a servicios complementarios. 
Lo destacable y lo que muchas personas desconocen, es que estos beneficios están disponibles incluso si no han cotizado lo suficiente para tener derecho a una pensión contributiva
En este artículo, examinaremos con más detalle estas prestaciones, cómo calificar a ellas y qué nivel de apoyo se puede esperar.

Requisitos de elegibilidad para la pensión de invalidez no contributiva

Para calificar para la pensión no contributiva de invalidez hay varios criterios que una persona debe cumplir. Primero, deben tener entre 18 y 65 años máximo. Además, deben vivir en España y haber residido en el país durante un período de cinco años, dos de los cuales deben ser consecutivos e inmediatamente anteriores a la fecha de solicitud de la prestación. 
También deben demostrar que tienen un grado de discapacidad igual o superior al 65%.

El importe de la pensión de invalidez no contributiva

El importe que se recibe por una pensión no contributiva de invalidez íntegra es de 484,61 euros mensuales pagados en 14 cuotas al año. Sin embargo, este importe puede variar dependiendo de las circunstancias individuales, incluyendo el nivel de ingresos.

Limitaciones de ingresos para la elegibilidad

Otra consideración clave para la elegibilidad es el nivel de ingresos del solicitante. Para 2023, los ingresos personales del solicitante, en cómputo anual, deberían ser inferiores a 6.784,54 euros. Si conviven con familiares, los ingresos o rentas anuales de todos los miembros de la familia no deben superar las cantidades que se detallan a continuación:
-Si se convive solo con el cónyuge o parientes de segundo grado:
  • Dos miembros convivientes: 11.533,72 euros/año.
  • Tres miembros convivientes: 16.282,90 euros/año.
  • Cuatro o más miembros convivientes: 21.032,08 euros/año.
-Si se convive con parientes de segundo grado donde se encuentra alguno de sus padres o hijos:
  • Dos miembros convivientes: 28.834,30 euros/año.
  • Tres miembros convivientes: 40.707,25 euros/año.
  • Cuatro miembros convivientes: 52.580 euros/año.
La unidad económica de convivencia incluye al beneficiario y a todas las personas con las que convive unidas por matrimonio o parentesco de consanguinidad o adopción hasta el segundo grado. En términos simples, incluye a padres, abuelos, hijos, nietos y hermanos del solicitante.

Complemento para pensionistas con un alto grado de discapacidad

Para pensionistas de pensión no contributiva de invalidez con un grado de discapacidad igual o superior al 75% y que demuestren que necesitan la ayuda de otra persona para realizar actos esenciales de la vida, se brinda un complemento adicional del 50%, de los 6.784,54 euros anuales. Esto suma un importe adicional fijado en 3.392,27 euros anuales.

¿Qué es y qué hace el Imserso?

El Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso) es un organismo público de España con un papel fundamental en el apoyo a las personas mayores, con discapacidad o en situación de dependencia. Su misión abarca desde la gestión de pensiones no contributivas hasta la promoción de la autonomía personal y el bienestar social de estos grupos vulnerables.
Se trata de un organismo que administra una variedad de programas y servicios que incluyen vacaciones para mayores, termalismo social y apoyo a centros y servicios de atención a personas mayores y con discapacidad. Además, colabora en el desarrollo de políticas sociales que fomentan la integración y la mejora de la calidad de vida de sus beneficiarios.
Constantemente, busca innovar en sus servicios y adaptarse a las necesidades cambiantes de la sociedad. Esto incluye la implementación de tecnologías de información y comunicación, así como el fomento de la investigación en gerontología y geriatría.
Además, la labor de Imserso tiene un impacto significativo en la sociedad española no solo por el apoyo económico que proporciona a través de las pensiones no contributivas, sino también por su contribución a la cohesión social y el bienestar de las personas mayores y con discapacidad. Su enfoque integral ayuda a garantizar que estos grupos tengan acceso a recursos y oportunidades para vivir de manera digna y autónoma.

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